La Selección Juvenil terminó el último viernes una nueva concentración en el CeNARD con vistas al Sudamericano de la categoría que se jugará en octubre próximo. Antes de la Copa Panamericana Sub 23 y de un cuadrangular preparatorio en Mendoza, el técnico Fabián Muraco analiza este momento del equipo.
La Juvenil viene de jugar la Panamericana de Mayores, en la que se consagró subcampeona, y luego retomó el trabajo durante los primeros días de agosto en otra de las etapas previstas para este año. “La Copa nos dejó una experiencia muy positiva ya que cuatro juveniles fueron titulares y nos dio la opción de jugar con ellos a alto nivel. En lo personal, fue una excelente experiencia conduciendo y enfrentando rivales mayores”, explicó Muraco.
Sin embargo, a la hora de hacer el balance de la última concentración en el CeNARD, el técnico dijo: “Algunos chicos se confundieron (pensaron tal vez que haber jugado con mayores los hacía imprescindibles en la Juvenil) y dejaron de esforzarse, por lo cual hay que dar una vuelta de rosca, y si no elegiremos a otros”. A su vez, Muraco agregó: “No hubo cortes definitivos, sólo (Nicolás) Lazo fue a la Menor y (Alejandro) Araya no cumplió con pautas y por el momento tendrá que doblegar el esfuerzo en su club para ser citado nuevamente”.
Faltan dos meses para el Sudamericano y después de un trabajo que este año arrancó en marzo, el técnico expresó, sobre cuál sería el momento en el que están ahora en la preparación: “Hoy estamos en la etapa preparatoria, pero el equipo cuando juega sabe cómo hacerlo, estamos tratando de mejorar el ataque y el saque”.
Lo que se viene para la Selección Juvenil es una nueva concentración a fin de mes y luego, entre el 12 y 15 de septiembre, un cuadrangular en General Alvear, Mendoza, junto a la Menor y los Seleccionados Mayores de San Juan y el local. Luego, el 18 los chicos viajarán a Canadá para disputar unos amistosos antes de la Copa Panamericana Sub 23, que se disputará entre el 29 de septiembre y el 7 de octubre en Vancouver. Luego, entre el 18 y 26 del mismo mes será el Sudamericano.
Esta camada de los ’93 y ’94 se consagró campeona continental en 2010 en la etapa de Menores. “Con respecto al Sudamericano, siempre vamos con la meta de clasificar al Mundial y si podemos hacerlo como campeones, mejor, así seguimos dejando a la Argentina en lo más alto, pero los rivales también crecen y mejoran. Casi 2 años y medio después, uno no sabe con qué se puede encontrar”, analizó Muraco y completó: “Para llegar bien, hay que tener mentalidad y espíritu de equipo y mejorar la técnica al límite de la perfección, ya que físicamente estamos lejos de los mejores por biotipo y base”.
Fuente: María Eugenia Candal / Somos Vóley
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